English
Más idiomas en PDF
Nuestra línea de asistencia para el cáncer funciona las 24 horas, los 7 días de la semana y proporciona información y respuestas a las personas que están lidiando con el cáncer. Podemos conectarle con especialistas capacitados con información sobre el cáncer, que responderán preguntas acerca del diagnóstico de cáncer, sabrán guiarle y escuchar con compasión.
Llámenos al 1-800-227-2345*
Estamos a su disposición para cuando lo necesite, a cualquier hora del día y de la noche y todos los días del año.
Comuníquese vía Chat*
Haga clic en el botón Chat en directo que aparece al final de la página.
Programar una sesión por videochat*
Apoyo para quienes prefieran hacerlo frente-a-frente con su orientador.
Nuestros especialistas altamente capacitados están disponibles por teléfono las 24 horas, los 7 días de la semana y pueden asistirle por videollamada y mensajería instantánea en línea de lunes a viernes. Conectamos a pacientes, cuidadores y familiares con servicios y recursos imprescindibles en cada etapa de su experiencia con el cáncer. Pregúntenos cómo involucrarse y apoyar la lucha contra el cáncer. Algunos de los temas con los que podemos ofrecer ayuda incluyen:
Para preguntas médicas, le animamos a revisar su información con su médico.
El tratamiento del cáncer de colon se basa en gran medida en la etapa (extensión) del cáncer, aunque otros factores también pueden ser importantes.
La cirugía es usualmente el primer tratamiento o el tratamiento principal para las personas con cánceres de colon que no se han propagado a partes distantes. Puede que también administre quimioterapia tras la cirugía (referida como un tratamiento adyuvante) En la mayoría de los casos, la terapia adyuvante se administra por aproximadamente 6 meses.
Debido a que los casos en etapa 0 no se han desarrollado más allá del revestimiento interno del colon, a menudo una cirugía para extraer todo cáncer es lo único que se requiere. En la mayoría de los casos esto se puede hacer al extraer el pólipo o al extirpar el área con el tumor canceroso mediante una colonoscopia (escisión local). En los casos en los que el tumor canceroso sea de un tamaño mayor que no haga posible la extracción total, puede que se proceda con la cirugía para extirpar una parte del colon (colectomía parcial).
Los cánceres de colon en etapa I han crecido más profundamente hacia las capas de la pared del colon, pero no se han propagado fuera de la pared del colon en sí (ni hacia los ganglios linfáticos adyacentes).
La etapa I incluye cánceres que fueron parte de un pólipo. Si el pólipo se extrae completamente durante la colonoscopia, sin células cancerosas en los bordes (márgenes) de la muestra obtenida, puede que no sea necesario administrar otro tratamiento.
Si el cáncer presente en el pólipo es de grado alto, o hay células cancerosas en los bordes del pólipo, lo recomendable podría ser más cirugía. Es posible que también se recomiende más cirugía si el pólipo no se pudo extirpar completamente o si tuvo que ser extraído en muchos fragmentos, dificultando ver si había células cancerosas en los bordes.
Para los cánceres que no están en un pólipo, el tratamiento convencional consiste en colectomía parcial (cirugía para extirpar la sección del colon que contiene cáncer y los ganglios linfáticos cercanos). Por lo general, no se necesitará tratamiento adicional.
Muchos de los casos de cáncer de colon en etapa II han traspasado la pared del colon y posiblemente también los tejidos circundantes, pero aún sin alcanzar a los ganglios linfáticos.
La cirugía para extirpar la sección del colon que contiene el cáncer (colectomía parcial) junto con los ganglios linfáticos cercanos puede que sea el único tratamiento que se necesite. Sin embargo, su médico puede recomendar quimioterapia adyuvante (quimio después de la cirugía) si su cáncer tiene un mayor riesgo de regresar (recurrir) debido a ciertos factores, como si:
El médico también podría analizar su tumor en busca de cambios genéticos específicos, llamados MSI o MMR, para ayudar a determinar si la quimioterapia adyuvante sería útil.
No todos los médicos concuerdan acerca de cuándo deben usar quimioterapia para los cánceres de colon en etapa II. Es importante que consulte con su médico sobre los riesgos y beneficios de la quimioterapia, incluyendo qué tanto pudiera reducir su riesgo de recurrencia y cuáles efectos secundarios podrían ser propensos a surgir.
Si se emplea la quimioterapia, las principales opciones incluyen 5-FU, leucovorín oxaliplatino o capecitabina, aunque también se pueden usar otras combinaciones.
Los cánceres de colon en etapa III se han propagado a los ganglios linfáticos cercanos, pero aún no se han extendido a otras partes del cuerpo.
El tratamiento convencional para esta etapa consiste de cirugía para extirpar la sección del colon que contiene el cáncer (colectomía parcial) junto con los ganglios linfáticos cercanos, seguida de quimioterapia adyuvante.
Para la quimioterapia, el régimen FOLFOX (5-FU, leucovorín, y oxaliplatino) o el régimen CAPEOX (capecitabina y oxaliplatino) se usan con más frecuencia, aunque algunos pacientes pueden recibir 5-FU con leucovorín o capecitabina sola según la edad y sus necesidades de salud.
Para algunos casos de cáncer de colon en etapa avanzada que impida la extracción total mediante cirugía, la quimioterapia neoadyuvante suministrada junto con radioterapia (el conjunto de ambas es referido quimiorradiación) podría ser la alternativa recomendable a seguir para reducir el tamaño del tumor, generando posteriormente la posibilidad de extirpar el tumor con cirugía. Para algunos cánceres avanzados que se extirparon mediante cirugía, en los cuales se descubrió que estaban adheridos a algún órgano cercano o aquellso en cuyas pruebas médicas den resultado positivo de presencia de cáncer (cáncer remanente o que no fue extraído tras la cirugía), la radiación adyuvante podría ser recomendable. La radioterapia, la quimioterapia, o ambas, pueden ser opciones para las personas que no están lo suficientemente saludables como para someterse a cirugía.
Los cánceres de colon en etapa IV se han propagado desde el colon hasta órganos y tejidos distantes. Con más frecuencia, el cáncer de colon se propaga al hígado, aunque también se puede propagar a otras partes del cuerpo, como pulmones, cerebro, peritoneo (la membrana que reviste la cavidad abdominal) o ganglios linfáticos distantes.
En la mayoría de los casos, es poco probable que la cirugía cure estos cánceres. Sin embargo, si sólo hay pocas y pequeñas áreas de propagación (metástasis) en el hígado o los pulmones y se pueden extraer junto con el cáncer de colon, la cirugía puede que ayude a que el paciente viva por más tiempo. Esto significaría realizar una cirugía para eliminar la sección del colon que contiene el cáncer junto con los ganglios linfáticos cercanos, además de la cirugía para eliminar las áreas de propagación del cáncer. Es común que tras la operación la siguiente parte del tratamiento sea suministrar quimioterapia. En algunos casos, se puede usar la infusión arterial hepática si el cáncer se propagó al hígado.
Si las metástasis no se pueden extirpar debido a que son muy grandes o hay demasiadas, se puede administrar quimioterapia antes de realizar cualquier cirugía (quimioterapia neoadyuvante). Si posteriormente el efecto observado resultó en una disminución del cáncer, entonces puede que se determine adecuado intentar la extracción del cáncer en su totalidad mediante la cirugía. Podría ser que también tras esta operación se suministre más quimioterapia. Para los tumores en el hígado, puede ser otra opción destruirlos con ablación o embolización.
Si el cáncer se ha propagado demasiado como para tratar de curarlo con cirugía, la quimioterapia es el tratamiento principal. Puede que aún sea necesario realizar una cirugía si el cáncer está bloqueando el colon o es probable que lo haga. Algunas veces, se puede evitar tal cirugía al insertar una endoprótesis o stent (un tubo hueco de metal) en el colon durante una colonoscopia con el fin de mantenerlo abierto. De lo contrario, puede que en algunos casos se lleven a cabo operaciones, tales como una colectomía o una colostomía de derivación (cortar el colon sobre el nivel del cáncer y se adhiere el extremo a una abertura en la piel del estomacal para permitir que los desechos salgan del cuerpo).
Para los casos de cáncer colorrectal en etapa IV, si el médico determina que la cirugía es recomendamble, es muy importante que el paciente comprenda cuál es la razón por la cual se estaría sometiendo a esta operación, ya sea que tenga como objetivo la cura, o bien, que el objetivo sea aliviar algún malestar o algunos síntomas debido al desarrollo del tumor.
La mayoría de la gente con cáncer en etapa IV recibirá quimioterapia y/o terapias dirigidas para controlar el cáncer. Algunos de los regímenes más comúnmente usados son:
La selección de los regímenes depende de varios factores, incluyendo cualquier tratamiento previo y su salud general.
Si uno de estos regímenes ya no surte efecto, se puede tratar con otro.
Para las personas cuyas células cancerosas presenten cambios en ciertos genes o proteínas, los medicamentos de terapia dirigida podrían ser ser una opción.
Para las personas cuyas células cancerosas tienen altos niveles de inestabilidad de microsatélites (MSI) o cambios en uno de los genes MMR, una opción después de la quimioterapia inicial podría ser el tratamiento con un medicamento de inmunoterapia como pembrolizumab (Keytruda) o nivolumab (Opdivo).
Para los casos de cáncer colorrectal en etapa avanzada, la radioterapia también se puede emplear para ayudar a prevenir o aliviar síntomas, como dolor en el colon debido al tumor. También podría usarse para tratar áreas de propagación, como en los pulmones o los huesos. Puede que encoja el tamaño de los tumores durante un tiempo, pero no es propenso a curar la enfermedad. Si su médico recomienda radioterapia, es importante que usted entienda el objetivo del tratamiento.
Un cáncer recurrente significa que el cáncer ha vuelto a aparecer después del tratamiento. La recurrencia puede ser local (cerca del área del tumor inicial) o puede estar en órganos distantes.
Si el cáncer regresa localmente, algunas veces la cirugía (a menudo seguida por quimioterapia) puede ayudarle a vivir por más tiempo y puede hasta curarle. Si el cáncer no se puede extraer mediante cirugía, se puede intentar usar quimioterapia primero. Si el tamaño del tumor se encoje lo suficiente, la cirugía podría ser una opción. Posteriormente, se podría suministrar más quimioterapía.
Si el cáncer regresa en un área distante, es más probable que aparezca primero en el hígado. La cirugía podría ser una opción para algunas personas. De no ser así, puede que la quimioterapia se use para intentar reducir el tamaño del tumor (o tumores), la cual puede que sea seguida por cirugía para extraerlo(s). Las técnicas de ablación o embolización también podrían ser una opción para el tratamiento de algunos tumores hepáticos.
Si el cáncer se ha propagado demasiado como para ser tratado con cirugía, se puede usar quimioterapia, terapias dirigidas, o ambas. Los planes de tratamiento posibles serán los mismos que los que se emplean para tratar la enfermedad en etapa IV.
Para las personas cuyos cánceres presentan ciertas cambios genéticos, otra opción podría ser el tratamiento con inmunoterapia.
Sus opciones dependen de cuáles medicamentos de quimioterapia se le administraron (si así fuera) antes de que el cáncer regresara y cuánto tiempo hace desde que los recibió, así como de su estado general de salud. Puede que en algún punto usted necesite cirugía para aliviar o prevenir el bloqueo del colon u otras complicaciones locales. Además, puede que la radioterapia sea una opción para aliviar síntomas.
Los cánceres recurrentes a menudo pueden ser difíciles de tratar. Por lo tanto, podría querer consultar con su médico si hay estudios clínicos que sean adecuados a su situación de tratamientos más recientes.
Para obtener más información, refiérase al contenido sobre la recurrencia del cáncer.
Equipo de redactores y equipo de editores médicos de la American Cancer Society
Nuestro equipo está compuesto de médicos y enfermeras con postgrados y amplios conocimientos sobre el cáncer, al igual que de periodistas, editores y traductores con amplia experiencia en contenidos médicos.
Lawler M, Johnston B, Van Schaeybroeck S, Salto-Tellez M, Wilson R, Dunlop M, and Johnston PG. Chapter 74 – Colorectal Cancer. En: Niederhuber JE, Armitage JO, Dorshow JH, Kastan MB, Tepper JE, eds. Abeloff’s Clinical Oncology. 6th ed. Philadelphia, pa: Elsevier: 2020.
Libutti SK, Saltz LB, Willett CG, and Levine RA. Ch 62 - Cancer of the Colon. En: DeVita VT, Hellman S, Rosenberg SA, eds. DeVita, Hellman, and Rosenberg’s Cancer: Principles and Practice of Oncology. 11th ed. Philadelphia, pa: Lippincott Williams & Wilkins; 2011.
National Cancer Institute. Physician Data Query (PDQ). Colon Cancer Treatment. 2020. Accessed at https://www.cancer.gov/types/colorectal/patient/colorectal-treatment-pdq on February 20, 2020.
National Comprehensive Cancer Network (NCCN). NCCN Clinical Practice Guidelines in Oncology: Colon Cancer. V.3.2022. Accessed at https://www.nccn.org/professionals/physician_gls/pdf/colon.pdf on January 20, 2023.
Actualización más reciente: enero 26, 2023
La información médica de la American Cancer Society está protegida bajo la ley Copyright sobre derechos de autor. Para solicitudes de reproducción, por favor refiérase a nuestra Política de Uso de Contenido (información disponible en inglés).